La Intendencia de Salto ratifica su compromiso con el boleto gratuito a jubilados y pensionistas de nuestro departamento a raíz de una iniciativa impulsada por la actual administración. Son unas 27.000 personas las que en Salto viajan gratuitamente como usuarios del servicio de transporte urbano de pasajeros de la Intendencia, sin restricciones de líneas ni horarios ni días. Ese universo se integra con el componente de 22.000 beneficiarios del Banco de Previsión Social (BPS) y 5.000 afiliados a la Caja de Retirados y Pensionistas Militares y Policiales. Fue durante la actual Administración que se ejecutó la tarea de sociabilización del transporte como parte de uno de los puntos fundamentales del plan de gobierno del primer período de Germán Coutinho como intendente de Salto. Y que comenzó cumpliendo la promesa electoral de bajar el precio del boleto s $ 6 –a la mitad del precio anterior--, y mantenerlo durante el quinquenio. Continuó luego con el convenio pionero en el país con el BPS, beneficiando a unos 22.000 jubilados y pensionistas, y la incorporación de unidades especiales para el transporte social equipadas con accesibilidad universal para facilitar el ascenso, transporte y descenso de personas con discapacidad. Y una nueva acción en el mismo sentido de sociabilización del transporte público dio cabida a otro sector de pasivos (esta vez del ámbito público) tal es el que engloba a los retirados del Ejército y de la Policía, sumando otros 5.000 beneficiarios, que ya no pagarán el boleto en los ómnibus de la Intendencia por propia decisión del gobierno departamental. Esta política social demuestra permanentemente el acierto de la Administración en implementar su desarrollo, delineando récords de estadística para el departamento, como el promedio de casi 30.000 boletos que se cortan a diario en el servicio y las cifras de los meses de demanda pico en el año que rondan entre 600.000 y 700.000, registro nunca antes alcanzados. Asimismo, la originalidad de la propuesta y su forma de instrumentación, además de su demostrada viabilidad, revolucionaron el interés en varios lugares del país, al punto de que se recibieron consultas de diversos sectores. Y Salto es hoy ejemplo para otros uruguayos que reclaman un servicio similar en sus ciudades. Y hasta candidatos a intendente de otros departamento estudian o proponen versiones cercanas en sus campañas.